En cinematografía, el movimiento de cámara es una de las técnicas esenciales en cinematografía. Permite a los directores realizar cambios en el encuadre o en la perspectiva sin necesidad de hacer cortes en la escena. Esto altera el punto de vista del espectador para sumergirlo en la historia de una manera más directa y emocional. La cámara puede estar fija (y girar sobre el trípode que la sustenta) o puede desplazarse físicamente a través de un operador de cámara o de maquinaria específica para ello.