A mi entender el surgimiento de las Competencias Clave supone una respuesta a las demanda de la sociedad en la que vivimos. Si bien en una principio se enfocaba más al ámbito laboral, hoy en día se ha extendido a todos los órdenes del ámbito educativo; desde mi punto de vista con el fin de unificar criterios que favorezcan el establecimiento de una marco normativo planificado y eficaz a la hora de hacer frente a los retos futuros que acaecen dentro de un mundo que pretende ser globalizado.

Las competencias como tales se diferencian de las destrezas, y suponen una integración  de las primeras así como de los conocimientos y de las actitudes que hemos de tener en nuestra vida para afrontar todo tipo de retos desde diferentes dimensiones que van desde la cognitiva a la instrumental o a la actitudinal.

El sentido dinámico que tiene la competencia clave se diferencia del sentido estático de la competencia básica, asimismo propone el aprendizaje como un elemento que se va a prolongar durante toda nuestra vida, ya que supone una adaptación y reciclaje al mundo en constante cambio en el que vivimos. Por ese motivo es muy necesario que tengamos presente la necesidad de trabajar las competencias clave en nuestra clase de forma que tengamos una visión mucho más amplia del trabajo que realizamos y del beneficio que nuestros alumnos van a recibir.

Aunque el aprendizaje a lo largo de la vida se considera cada vez más una responsabilidad individual, la sociedad aún tiene la responsabilidad de establecer las bases y de equiparnos con las competencias clave necesarias pero los centros escolares por sí mismos no pueden ofrecer toda la gama de competencias clave. Des mi punto de vista el aprendizaje informal a través de la familia, los amigos, los medios de comunicación es igualmente importante cuando se trata de desarrollar las competencias cognitivas, sociales y personales. Los conocimientos y las destrezas que se obtienen a través de la enseñanza formal se pueden convertir en competencias cuando se transfieren a contextos informales. Y creo que lo mismo sucede con los conocimientos y destrezas que se aprenden fuera de los centros escolares, los cuales, cuando se aplican en el entorno escolar, se pueden transformar también en competencias.

En cuanto a mi trabajo en clase creo que las competencias clave suponen un cambio que me hace plantearme, a nivel docente y humano, un enfoque distinto. No se trata de la transmisión de conocimientos sino del modo en que esos conocimientos van a englobarse para darnos una forma que supondrá para nuestro futuro una herramienta esencial con la que afrontaremos todos los retos posibles y en todos los ámbitos que se nos presenten.

Así pues debemos, como docentes, enfocar nuestra manera de enseñar hacia una metodología que propicie el desarrollo del niño en todos los aspectos de forma que formemos a un individuo que sea capaz de desenvolverse en cualquiera de los aspectos que conforman la vida y la sociedad en la que vivimos así como sus demandas dentro de un mundo que hemos dado en llamar globalizado.