El proyecto eSkills: Learning Languages Together – Destrezas digitales, aprendiendo lenguas juntos – Competenze digitali, imparare le lingue insieme es una iniciativa eTwinning lanzada en el curso 2022–2023 por dos profesoras de lenguas extranjeras con amplia experiencia en innovación educativa: Carmen María Fernández Rodríguez (EOI A Coruña, España) yAnna Maria Sganga Forero (Campus Leonardo Da Vinci, Umbertide, Italia). La coordinación internacional del proyecto permitió el desarrollo de actividades colaborativas entre alumnado de diferentes niveles y contextos educativos, con un enfoque integrado en el aprendizaje de idiomas y competencias digitales.

Durante su desarrollo, el proyecto ha contado con la participación activa de estudiantes adolescentes y adultos en distintos países europeos, combinando tareas asincrónicas y encuentros virtuales. Entre sus logros más destacados se encuentran la obtención del Sello de Calidad Nacional eTwinning en los países socios, y el Sello de Calidad Europeo, reconociendo la calidad pedagógica, el trabajo colaborativo y el impacto del proyecto en el aprendizaje del alumnado. eSkills se ha consolidado así como una buena práctica en el ámbito de la educación digital y multilingüe en entornos virtuales de colaboración.

El proyecto ha sido una experiencia colaborativa internacional que ha integrado el desarrollo de competencias lingüísticas y digitales en entornos virtuales y uno de sus aspectos más destacables ha sido su enfoque en la evaluación digital formativa, con especial atención al seguimiento del progreso del alumnado, la detección de necesidades específicas y la adaptación de la enseñanza. Aquí se analiza cómo los instrumentos y estrategias de evaluación utilizados en el proyecto, documentados en los cuestionarios intermedios y finales del TwinSpace.

Evaluación formativa y digital: principios aplicados en eSkills

Desde el inicio, eSkills apostó por una evaluación continua y formativa, utilizando herramientas digitales para recoger información, analizar el progreso y promover la mejora constante. Esta evaluación se aplicó tanto al alumnado como al diseño del propio proyecto. Entre los principios destacados:

• Feedback inmediato y constructivo en las tareas colaborativas.

• Autoevaluación y coevaluación entre estudiantes.

• Uso de instrumentos digitales como formularios interactivos, rúbricas compartidas, cuestionarios online y diarios de aprendizaje.

• Monitorización constante del progreso mediante informes, entregas y participación en plataformas digitales como eTwinning Live, Padlet, Canva, Genially o Microsoft Forms.

• Cuestionario intermedio: diagnóstico y ajuste pedagógico

  El cuestionario intermedio del proyecto refleja claramente cómo el equipo docente usó la evaluación para ajustar la práctica pedagógica a partir del análisis de datos. Algunos puntos destacados:

• Se recogió información detallada sobre el nivel de implicación y motivación del alumnado.

• Se evaluó la dificultad de las tareas y la eficacia de las herramientas digitales.

• El profesorado detectó diferencias en el progreso entre los grupos, lo que permitió rediseñar tareas y ajustar el ritmo de trabajo en función de las necesidades detectadas.

• Cuestionario final: seguimiento del progreso y reflexión

  En el cuestionario final, se constata la eficacia del enfoque formativo del proyecto:

• La mayoría del alumnado valoró positivamente la posibilidad de ver su progreso a lo largo del proyecto gracias a tareas secuenciadas y evaluaciones digitales.

• Los docentes destacaron el uso de rúbricas y formularios como herramientas clave para seguir el desarrollo de competencias y tomar decisiones pedagógicas fundamentadas.

• Se subrayó la mejora en la autoeficacia del alumnado y en su capacidad de autorregulación, fruto del feedback regular y de las oportunidades de revisión y mejora de sus producciones.

El proyecto eSkills ha demostrado que una evaluación digital bien planificada no solo mide el aprendizaje, sino que lo transforma. El uso sistemático de herramientas digitales para recoger, analizar e interpretar datos del progreso del alumnado ha permitido personalizar la enseñanza y favorecer un enfoque más inclusivo, motivador y efectivo. Estas prácticas constituyen una muestra clara de competencia digital avanzada del profesorado implicado.