COMPETENCIAL DIGITAL

La competencia digital implica un uso crítico de las tecnologías de la sociedad de la información para el aprendizaje, trabajo, comunicación, así como para el disfrute de la persona. Así mismo, esta competencia consiste en disponer de habilidades para buscar, obtener, procesar, comunicar información y transformarla en conocimiento. De cualquier modo, desarrollar esta competencia requiere un dominio de lenguajes específicos básicos, así como aplicar en distintas situaciones y contextos el conocimiento de los diferentes tipos de información, sus fuentes, sus posibilidades y su localización.

Dimensión cognitiva

Comprensión del potencial de las nuevas tecnologías en el apoyo a la creatividad e innovación con el fin de conseguir una plenitud personal.

Comprensión de las aplicaciones principales de un ordenador, incluyendo el proceso de datos, hojas de cálculo, bases de datos, almacenamiento y manejo de información.

Conciencia de las oportunidades dadas por el uso de Internet y la comunicación por medio de los medios electrónicos y las diferencias entre el mundo real y virtual.

Comprensión básica de la seguridad y validez de la información disponible y conciencia de la necesidad de respetar principios éticos en el uso interactivo de las tecnologías de la información.

Dimensión instrumental

Habilidad para usar recursos apropiados, para acceder y buscar en diferentes páginas webs, foros y correos, habilidad para la creatividad en diferentes contextos, así como habilidad para buscar y procesar información electrónica y usarla de forma sistemática.

Dimensión actitudinal

Actitud positiva y sensibilidad hacia un uso responsable y seguro de internet.

Interés por usar las nuevas tecnologías para ampliar conocimientos.

Propensión al uso de las Tic para trabajar de forma autónoma y grupal, así como una actitud crítica y reflexiva en la valoración de la información disponible.

SENTIDO DE LA INICIATIVA Y ESPÍRITU EMPRENDEDOR

Implica la capacidad de  transformar las ideas en actos. Significa tener conciencia de la situación en la que están,  del contexto en el que se sitúa su trabajo y aprovechar las ocasiones que se les presenten.  Se  relaciona con ser creativos a  la hora de elegir.

Esta competencia está presente en todos los ámbitos en los que se desenvuelve una persona: personal, laboral o académico, social permitiendo que desarrollen sus actividades  y aprovechen nuevas oportunidades. Constituye también los cimientos de otras capacidades y conocimientos más específicos. Incluye también los valores éticos asociados. Es fundamental para la formación de futuros emprendedores.

Dimensión cognitiva

Conocimientos sobre oportunidades de carrera, sobre el mundo del trabajo, educación económica y financiera, líneas generales que rigen el funcionamiento de las sociedades, organizaciones sindicales, económicas, gestión de recursos humanos, diseño e implementación de un plan.

Dimensión instrumental

Capacidad de análisis, capacidad de planificación, organización, gestión y toma de decisiones, capacidad de adaptación al cambio, liderazgo y delegación, comunicación efectiva. Saber trabajar en equipo, sentido de la responsabilidad, autoconfianza, capacidad para determinar los puntos fuertes y débiles de uno mismo y de un proyecto, gestión de riesgos.

Dimensión actitudinal

Capacidad de actuar de forma creativa e imaginativa. Conocerse y valorarse, autonomía y espíritu emprendedor. Capacidad de ser proactivo tanto en la vida social como en la profesional. Se relaciona también con estar motivado y ser perseverante en todos los ámbitos de la vida.