1.1. Las Competencias Clave
Este curso nos da la oportunidad de profundizar en uno de los aspectos más importantes y relevantes referentes a la educación, el paradigma de las Competencias Clave.
Por desgracia, es un tema sobre el que todos hemos hablado en algún que otro café con nuestros compañeros pero sobre el que todavía existe un gran desconocimiento. O peor aún, mucha gente habla para intentar quitarle importancia o credibilidad. Quiero pensar que se hace por desconocimiento o, en muchas ocasiones, por comodidad. Son muchos años trabajando de la misma manera como para ponernos ahora a plantearnos grandes retos y grandes cambios.
El artículo de Javier Valle y Jesús Manso me parece un muy buen punto de partida para todos aquellos que queremos conocer a que nos referimos al hablar de Competencias Clave, de donde proviene esta corriente educativa y hasta donde nos puede llevar.
Está claro que el camino a seguir no es ni fácil ni rápido. No podemos pretender leer un par de artículos, hacer algún curso y ser ya unos expertos en el tema. Tampoco podemos exigir a todos nuestros compañeros y mucho menos a los que se muestran reticentes a adoptar esta nueva forma de educar de hoy para mañana. Considero que el cambio es tan sustancial que es necesario un nivel de implicación muy alto para poder llevarlo a cabo. Es aquí donde cobra especial importancia el papel de los Gobiernos y su política educativa. Por supuesto que la situación vivida en nuestro país los últimos años no es la más adecuada para implantar un nuevo paradigma educativo. Creo que prácticamente todas las personas que trabajamos en Educación estamos de acuerdo en que no puede estar cambiando cada cuatro años dependiendo del partido que gane las elecciones. Pero eso sería entrar en otra discusión.
Uno de los aspectos que me ha parecido más interesantes del artículo es la gran vinculación que existe entre Competencias Clave y Aprendizaje Permanente. Es obvio que nuestra sociedad no se parece en nada a la sociedad que conocieron nuestros abuelos. Hoy en día vivimos en un mundo en cambio continuo y donde el que no esté en una constante formación se quedará totalmente obsoleto. También debemos tener claro que no se trata simplemente de cambiar de nombre a las cosas o de realizar algunas modificaciones normativas. Es un cambio mucho más profundo.
A nivel personal creo que las personas que trabajamos en el mundo educativo no podemos dar la espalda a este nuevo planteamiento educativo. Debemos tener clarísimo que los grandes beneficiados de esta nueva forma de plantear la educación son nuestros alumnos ya que les prepara para saber afrontar el mundo real cuando salgan de nuestras aulas.
Espero que este curso me ayude a poder aplicar de forma correcta esta nueva forma de educar. Yo doy clases en Secundaria y cada vez es más habitual ver alumnos que te plantean para que sirve gran parte de lo que están estudiando. Es duro admitirlo pero muchas veces tienen razón. Nos empeñamos en educar a todos por igual y se nos olvida que cada alumno es un mundo totalmente diferente. Si logramos formar personas competentes les estaremos ayudando a poder enfrentarse a este mundo de la mejor manera posible.


