Prejuicios, estigmas y actos de discriminación en contra de Migrantes: La historia de un tormento inadvertido.

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Prejuicios, estigmas y actos de discriminación en contra de Migrantes:

La historia de un tormento inadvertido.

Por: Jesús Guillermo Tovar Rodríguez.

“Privar a las personas de sus derechos humanos es poner en tela de juicio su propia humanidad.”

Nelson Mandela

En calles de barrios hacinados, con altos índices delictivos, en condiciones deplorables e inhumanas, es el habitual panorama de todo aquel que decide emigrar, a pesar que la migración se realiza desde tiempos inmemoriales, lo visto en las últimas décadas a la fecha, hace ver lo forzadas que resultan, ya sea al no encontrarse satisfechos aspectos básicos como el trabajo o la seguridad, así como verse rebasados por la guerra, los desastres naturales o el colapso económico, llevando a la necesidad de dejar todo atrás, encaminado a su familia ante un gran y sombrío incierto, enfrentándose tras la salida de su país, a un entorno hostil con una aparente muerte simbólica en donde padecen de xenofobia, racismo, discriminación, revictimización, entre otros males.

Un claro ejemplo de lo anterior, puede visualizarse en películas como Sin nombre, de Cary Fukunaga, La vida precoz y breve de Sabina Rivas, de Luis Mandoki, o La jaula de oro de Diego Quemada-Diez, donde se dilucidan los grandes monstruos a su paso, algo que Fernanda Solórzano de Letras Libres explica así:

Policías de migración con ética de asaltantes, civiles que interceptan al tren con la complicidad del conductor, pandillas que van solo por las mujeres, secuestradores que extorsionan a los contactos de los migrantes en Estados Unidos, y, en la frontera del norte, el legendario minute men: francotiradores civiles que le ahorran a la migra las molestias de la deportación.[1]

Con todo ello cabe aludir que México es un país de origen, tránsito, destino y retorno de migrantes, siendo los mismos un grupo vulnerable, comenzando con aquellos provenientes de Centroamérica, Sudamérica, África o inclusive nuestros connacionales en Estados Unidos, todos ellos susceptibles a violaciones de sus Derechos Humanos por parte de autoridades, el yugo del crimen organizado, así como la imposibilidad de acceder a la justicia, pronta y expedita, recordando que la Ley de migración en su Artículo sexto reza lo siguiente:

El Estado mexicano garantizará el ejercicio de los derechos y libertades de los extranjeros reconocidos en la Constitución, en los tratados y convenios internacionales de los cuales sea parte el Estado mexicano y en las disposiciones jurídicas aplicables, con independencia de su situación migratoria.[2]

Para atender la problemática, La Suprema Corte de Justicia de la Unión (SCJN) ha presentado el Protocolo de actuación para quienes imparten justicia en casos que involucren a personas migrantes y sujetas de protección internacional[3], que desde 2015 ha influido en la manera en que se atienden los casos, dado que enfatiza en aspectos como No discriminación e igualdad, Pro persona, No devolución, Asistencia humanitaria, Interés superior del niño, niña o adolescente migrante, Presunción de inocencia, o en la Unidad Familiar.

Pero el asunto va más allá de estatutos jurídicos y cae en el terreno moral, el de la idiosincrasia del pueblo, algo que el Consejo Nacional Para Prevenir la Discriminación (CONAPRED) señala de la siguiente forma:

En México persisten los prejuicios contra las personas migrantes. Por ejemplo, según la Encuesta Nacional de Migración de la UNAM, “los extranjeros” son, junto con “las personas más ricas”, el grupo respecto al que más desconfianza se tiene en el país. Además, una quinta parte de la población cree que los extranjeros debilitan “nuestras costumbres y tradiciones”, y una proporción similar opina que “son demasiados” (…) a pesar de que México tiene una de las proporciones de población extranjera más bajas del continente y la más reducida entre los países de la OCDE.[4]

Continua a su vez, indicando que se tienen prejuicios como: Los migrantes contribuyen a que empeore la situación económica del país, los migrantes coadyuvan a que aumente la delincuencia, o más sencillos como decir que son analfabetas, pobres, holgazanes, pandilleros, indeseables, criminales y terroristas, actuando muchas veces como en Estados Unidos se refieren a los migrantes mexicanos.

Siendo menester concientizar sobre la migración pues el resultado de unas economías en crisis, del empobrecimiento de la población, de las violaciones de los derechos humanos, de la degradación del medio ambiente, de las diferencias cada vez mayores entre países ricos y pobres, de la guerra civil, de las guerras por el control de los recursos naturales, de las persecuciones políticas, de la inestabilidad política y de la corrupción y de la dictadura en muchos países de origen”[5]

Siendo posible considerarlos como refugiados, según la Declaración de Cartagena, pues la Ley sobre Refugiados y Protección Complementaria (2011) en su Artículo 13 establece:

La condición de refugiado se reconocerá a todo extranjero que se encuentre en territorio nacional, bajo alguno de los siguientes supuestos: (…) II. Que ha huido de su país de origen, porque su vida, seguridad o libertad han sido amenazadas por violencia generalizada, agresión extranjera, conflictos internos, violación masiva de los derechos humanos u otras circunstancias que hayan perturbado gravemente el orden público.[6]

Analizando todo lo anterior, es necesario mencionar a Immanuel Kant en su obra Hacia la paz perpetua y su noción sobre la hospitalidad de derecho:

hospitalidad significa aquí el derecho de un extranjero a no ser tratado hostilmente por el hecho de haber llegado al territorio de otro. Este puede rechazar al extranjero, si ello no acarrea la ruina de éste, pero mientras el extranjero se comporte amistosamente en su puesto, el otro no puede combatirlo hostilmente. No hay ningún derecho de huésped en el que pueda basarse esta exigencia (para esto sería preciso un contrato especialmente generoso, por el que se le hiciera huésped por cierto tiempo) sino un derecho de visita, derecho a presentarse a la sociedad, que tienen todos los hombres en virtud del derecho de propiedad en común de la superficie de la tierra, sobre la que los hombres no pueden extenderse hasta el infinito, por ser una superficie esférica, teniendo que soportarse unos junto a otros y no teniendo nadie originariamente más derecho que otro a estar en un determinado lugar de la tierra[7]

Por lo que a forma de conclusión podemos decir que tenemos varios grandes problemas, el primero de ellos es disminuir las causas que lo originan, como la corrupción y la pobreza, el segundo es eliminar a los monstruos que vuelven a la migración algo peligroso y finalmente erradicar los prejuicios que se tienen ante las personas que emigran, pues si bien hay personas que se pueden aprovechar de la situación para cometer ilícitos en el país, no debemos generalizar, debemos ver más allá y comprender las causas de los hechos, tener un poco de alteridad y recordar que independientemente de la nacionalidad, todos somos humanos, y no caer en la aseveración de Arendt, donde un individuo sólo puede albergar la esperanza de que se le respeten sus derechos sólo si cuenta con el título de ciudadanía que le confiere un estado particular.[8]

 

[1] Texto extraído de: https://www.letraslibres.com/mexico-espana/cinetv/la-jaula-oro-diego-quemada-diez

[2] Texto extraído del portal web de gobierno: http://www.diputados.gob.mx/LeyesBiblio/pdf/LMigra_120718.pdf

[3] Página de la SCJN para descargar el documento: https://www.sitios.scjn.gob.mx/codhap/protocolo-de-actuaci%C3%B3n-para-quienes-imparten-justicia-en-casos-que-afecten-personas-migrantes-y-suje

[4] Extraído del sitio web de CONAPRED: Fichas temáticas “Personas migrantes” https://www.conapred.org.mx/index.php?contenido=pagina&id=115&id_opcion=43&op=43

[5] Resolución del Parlamento Europeo sobre la política común de inmigración de la UE, de 28 de Septiembre de 2006

[6] Información extraída de https://acnur.org/fileadmin/Documentos/Proteccion/Buenas_Practicas/9183.pdf

[7] ¿ES POSIBLE PENSAR LA MIGRACIÓN Y EL REFUGIO DESDE LA HOSPITALIDAD KANTIANA? http://www.scielo.br/pdf/remhu/v26n53/2237-9843-remhu-26-53-205.pdf

[8] El concepto kantiano de ciudadanía: http://www.scielo.org.co/pdf/ef/n42/n42a06.pdf