Arkanoid

Parece claro que la motivación y la creatividad en el aula es algo que todos los docentes deberíamos buscar. Yo intento hacerlo cuando no me dejo arrastrar por la monotonía de los días. Y todos lo agracedemos, mis alumnos y yo.

La programación es un recurso que, como el agua en la madera, se va filtrando en las aulas, pero al contrario que aquélla no para mal, al contrario. Viene para quedarse y en todos los ámbitos se empiezan a conocer proyectos que, para sorpresa de muchos, los primeros los mismos docentes, permite que los alumnos aprendan más fácilmente, se interesen por la materia, se involucren en el aprendizaje. Este recurso que he conocido hoy: Arkanoid (inicio del mismo) da la posibilidad de plantearlo con los objetvos propios de un universitario pero lo puede llegar a conseguir un alumno de 4º de la ESO.

Me parece muy acertada la idea que se escribe en eldiario.es:

"Si un alumno de ingeniería llega a la universidad con conocimientos básicos de física, ¿por qué no llega también con conocimientos básicos de programación? ¿Tiene sentido que su primera experiencia en el campo de la programación sea, directamente, en la universidad? La respuesta a esta pregunta es algo que podemos encontrar, por ejemplo, en el manifiesto por la educación en ciencias de la computación en el siglo XXI:

“Creemos que todos los niños deberían tener la oportunidad de aprender ciencias de la computación, empezando en la escuela (…) Enseñamos física básica a cada niño, no con el objetivo principal de educar físicos si no porque todos ellos viven en un mundo gobernado por sistemas físicos. De la misma manera, todos los niños deberían aprender un poco de informática desde temprana edad porque van a vivir en un mundo en el que la computación está en todas partes.”

"