Competencias clave, un reto educativo en la sociedad actual

Área de coñecemento
Contexto educativo
462 Visitas
Compartir

Competencias clave, un reto educativo en la sociedad actual

(¿Qué, por qué y para qué?)

Educar en competencias supone un nuevo paradigma educativo que tiene como principal objetivo dar una respuesta adecuada a las necesidades educativas planteadas por un nuevo modelo de sociedad,  basada en fenómenos como la globalización, el multiculturalismo y la alfabetización informacional.  En otro orden de cosas, este nuevo paradigma tiene la peculiaridad de estar compartido por los responsables políticos de los diferentes países de la Unión Europea, con lo que su generalización y fundamentación quedan consensuadas en un marco legislativo superior al estrictamente nacional.

El origen de estos nuevos planteamientos teóricos sobre los procesos de enseñanza-aprendizaje hay que buscarlo en el proyecto DeSeCo (Definition and selection of competencies: theoretical and conceptual foundation) , elaborado por la OCDE en 1997 y en el que se define el concepto de competencia como el elemento central de todo aprendizaje, al integrar conjuntamente conocimientos, habilidades y actitudes a la hora de enfrentarse a una demanda concreta dentro de un contexto determinado. A partir de este proyecto se van a ir asentando las bases de un marco teórico conceptual que aplicado a los sistemas educativos supone una nueva concepción curricular, especialmente en lo que respecta a las propuestas metodológicas aplicadas y al desarrollo del  concepto de aprendizaje a lo largo de la vida (lifelong learning). 

Sucesivos acuerdos en el seno del Consejo de Europa desde Lisboa 2000,  van a desembocar en el año 2004 en la elaboración de un Marco Europeo de Referencia para las competencias clave del aprendizaje permanente que va tomando cuerpo y concreción en 2006 en la Recomendación del Parlamento Europeo y del Consejo de Europa sobre “Las competencias clave del aprendizaje permanente”. Posteriormente la UE publica en 2007 un manual práctico y divulgativo sobre competencias clave (7) en el que se define claramente el concepto de “competencia clave” y que supone un cambio radical en la concepción del qué, cómo y para qué enseñar, en definitiva un cambio radical en el paradigma educativo de los países de la UE.

En nuestro país, la educación por competencias se define por primera vez en la Ley Orgánica 2/2006, de 3 de mayo, de Educación (LOE), con la denominación de competencias básicas, en lugar de clave; sin embargo tenemos que reconocer que el concepto de competencia no acaba de integrarse en los currículos de las materias, de manera que la mayor parte del profesorado continuó centrando las programaciones de aula en los contenidos conceptuales y en propuestas metodológicas de carácter más disciplinar.

Con el objetivo de elaborar una propuesta práctica para incorporar la educación por competencias entre el profesorado,  el MEC inicio en el 2011 el denominado proyecto COMBAS que supuso un interesante proceso de formación del profesorado para la reflexión sobre este nuevo paradigma educativo y su aplicación práctica a través del intercambio de experiencias educativas integradoras, así como la elaboración de unidades didácticas y tareas integradas. La Ley Orgánica 8/2013, de 9 de diciembre, para la mejora de la calidad educativa (LOMCE) define 7 competencias clave como ejes fundamentales del cambio metodológico en los procesos de aprendizaje. En esta misma línea y para incidir de una manera más específica en este nuevo paradigma educativo y en sus consecuencias prácticas, el MECD publicó recientemente la Orden ECD/65/ 2015 de 21 de enero, “por la que se describen las relaciones entre las competencias, los contenidos y los criterios de evaluación de la educación primaria, la educación secundaria obligatoria y el bachillerato “. Este documento además de aportar una conceptualización de cada una de las competencias clave, presenta estrategias metodológicas para trabajar por competencias en el aula.  

Educar en competencias implica necesariamente un cambio en los elementos del currículo (qué, cómo, para qué enseñar-aprender). Partimos de la base de integrar dichas competencias en la práctica de aula a través de la elaboración de tareas y unidades didácticas integradas en las que contenidos, criterios de evaluación y estándares de aprendizaje se utilizan en relación con la adquisición de cada una de estas 7 competencias clave, de manera que las materias del currículum no se conciben como compartimentos estancos en sus contenidos sino que han de contribuir a formar alumnos y alumnas competentes. De esta idea se deriva la necesidad de trabajar las diferentes materias de forma interdisciplinar, elaborando propuestas didácticas innovadoras que promuevan un claro cambio en los procesos de aprendizaje, centrados no en la adquisición de contenidos disciplinares, sino más bien en la elaboración de tareas prácticas que tengan una relevancia social.