BREVE ENSAYO CRÍTICO

“Competencias clave como tendencia de la política educativa supranacional de la Unión Europea”

Tras la lectura de este artículo de Javier Valle en el cual se pone de manifiesto el origen de las Competencias Clave nacidas desde las políticas educativa europeas. En un primer lugar, nacen en el ámbito laboral y, posteriormente, se introducen en el ámbito educativo, sobre todo en la formación profesional. Las competencias clave suponen un cambio en el paradigma educativo, una nueva forma de pensar y entender el proceso de enseñanza y aprendizaje, un aprendizaje centrado en el alumnado, con la finalidad de que sea capaz de desenvolverse en la sociedad actual.

La sociedad actual, la Sociedad del Conocimiento, está caracterizada por una serie de fenómenos que demanda de un aprendizaje adaptada a ella y para toda la vida.  Dichos fenómenos son la globalización, la multiculturalidad, las tecnologías de la información y la comunicación, entre otros. En este contexto surgen las Competencias Clave. Lo que es cierto, que a nivel mundial se alude a las directrices marcadas por las UNESCO sobre competencias y sobre todo, a nivel europeo, la OCDE con su programa PISA, pone el acento a la importancia del aprendizaje por competencias.

Al aprendizaje a través de competencias está unido al término aprendizaje permanente, ambos son dos términos consecuentes de la actual sociedad, que demanda un nuevo aprendizaje, un aprendizaje a través de competencias para la vida.

El Marco europeo de referencia para las competencias clave del aprendizaje permanente recoge las ocho competencias clave, que son:

1. Comunicación en la lengua materna
2. Comunicación en lenguas extranjeras
3. Competencia matemática y competencias básicas en ciencia y tecnología
4. Competencia digital
5. Aprender a aprender
6. Competencias sociales y cívicas
7. Sentido de la iniciativa y espíritu de empresa
8. Conciencia y expresión culturales

En nuestro país, se introduce por primera vez el concepto de competencias con la Ley Orgánica 2/2006, 3 de mayo, de Educación (LOE), denominándolas competencias básicas, un nuevo elemento curricular integrado de manera aislada en el currículo. Actualmente, con la nueva ley educativa, LOMCE, se perfila un poco más el término de competencias, denominándolas Competencias Clave y estableciendo 7 competencias. No hace mucho, el Ministerio de Educación publicó  la Orden ECD/65/2015 sobre las competencias clave,  que establece la relación de las competencias con los contenidos y criterios de evaluación de la Educación Primaria, Secundaria y Bachillerato. Se trata de una normativa de carácter general y básico  para todas las Comunidades Autónomas.

Ahora bien, ¿Cómo afecta la introducción de las Competencias Clave en nuestro trabajo de aula?

Como especialista de francés y como tutora durante varios cursos escolares,  me he dado cuenta que es necesario un cambio en el actual modelo educativo, debemos de pasar de enseñar conocimientos a saber a aplicar los contenidos aprendidos a situaciones de la vida real, necesitamos integrar las competencias en el currículo y poner en la práctica un aprendizaje por competencias. Esto supone un cambio en el rol del docente, un cambio en el rol del alumnado y, sobre todo, un cambio metodológico, debemos dejar a un lado los libros de texto como única fuente de información, poner en práctica proyectos y tareas que permitan al alumnado descubrir y aprender nuevos conocimientos adecuados a la realidad en la que vivimos.  Pero todo esto, no es solo responsabilidad de los docentes, existen más factores que debemos tener en cuenta para provocar un cambio en el paradigma educativo, desde las políticas educativas,  las instituciones, las familias e incluso el propio alumnado.