Hola a todos. La verdad es que desde nuestro centro tenemos una escasa formación en cuanto al conocimiento profundo sobre competencias clave, pero sí hemos asistido a algunas charlas, intercambiado impresiones con compañer@s de otros centros, además de la lectura de documentación al respecto en la medida en la que nos ha sido posible,

Según mi opinión, y una vez leído el artículo, creo que tanto la terminología como la idea del empleo de competencias clave en el proceso de enseñanza y aprendizaje ha estado presente desde hace ya años. Es cierto que ha habido bastante polémica en torno a si el aprendizaje que proponemos de cara al futuro educativo es un mero cambio terminológico o de verdad implica una novedad real que puede aportarnos beneficios en cuanto a aprendizajes sólidos y resultados educativos.

Estoy de acuerdo en la idea de que el hecho de la existencia de un mundo donde destacan la globalización, grandes tecnologías de la información, multiculturalismo...hacen necesario un enfoque lo más adaptado posible a todas estas circunstancias, pero igualmente creo que no se puede quedar todo en una mera intención, discurso político o documento en papel o formato digital. Necesitamos que todo sea una realidad verdadera y sobre todo práctica además de teórica, si, como parece ser, apostamos por un plan común educativo y de aprendizaje a nivel de la Unión Europea, donde establecer unas pautas comunes de actuación para todos, puede reporta beneficios en el sentido en el que caminaremos con ideas más claras y comunes, cosa que puede ser realmente beneficiosa si es capaz de desarrollarse e implementarse adecuadamente.

Es interesante y muy esperanzador que tanto el aprendizaje por competencias clave como el aprendizaje permanente estén dando muestras de que están igualmente presente en las políticas

educativas actuales de la Unión Europea,desarrollándose de forma simultánea, interrelacionada

y complementaria. Es un punto de partida real e importantísimo para atender a una sociedad en continuo cambio y modernización, donde se requiere de una formación continua para dar una respuesta adecuada tanto a nivel educativo como en el mundo laboral.

Me parecen muy interesantes todas las referencias a las que el artículo hace mención en cuanto a las distintas e importantes fechas en las que han ido surgiendo las semillas iniciales de lo que hoy en día estamos buscando desarrollar de una forma adecuada en materia educativa. A este respecto, quisiera destacar las conclusiones del Consejo Europeo de Lisboa de 23 y 24 de Marzo de 2000, donde la educación debe ser un eje central en la política global de la Unión Europea.

Igualmente el Informe de la Comisión titulado

Futuros Objetivos Precisos de los Sistemas Educativos, adoptado

definitivamente por el Consejo Europeo de Estocolmo en 2001y la definición de las competencias clave de la Estrategia de Educación y

Formación 2010

me parecen unos referentes serios e importantísimos como buen punto de partida para el futuro.

Es muy esperanzador saber que queremos darle a “competencia” un significado mucho mayor que destreza, integrando todo tipo de conocimiento, actitudes y destrezas para responder de forma práctica y creativa en cualquier tarea relacionada con la vida, y es verdad que en función del contexto, nos va a requerir esa creatividad que en ocasiones va a ser única. Así como el término clave, que va a posibilitar la posterior adquisición de otros aprendizajes posteriores, más complejos e igualmente necesarios para la vida diaria.

En resumen, estimo que el ideal que perseguimos ya no es solamente una teoría, sino que está en proceso de crecimiento; las consideraciones y justificaciones que originan el aprendizaje por competencias clave, así como las intenciones y objetivos que perseguimos con ellas son realmente necesarios y serán productivos, siempre y cuando haya un acuerdo y una forma de caminar y colaborar de manera común entre todos los miembros de la sociedad que estamos implicados en ello, políticos, educadores, alumnado, familias...

En mi grupo clase, sería igualmente muy positivo este aprendizaje. Evidentemente implicaría un cambio a muchos niveles respecto a la forma de trabajar actual, materiales, programaciones, pruebas, contenidos a impartir...pero si logramos, como dije antes, hacer de todo esto una realidad estable y sólida, tendrá grandísimos beneficios para todos.