Los verbos irregulares en inglés son aquellos cuya conjugación no retoma la terminación –ed en sus formas de pretérito y pasado participio. Por lo tanto, para conjugarlos es necesario considerar reglas y excepciones específicas. 

La importancia de dominar los verbos irregulares es que existe una infinidad de ellos, desde los que son de uso diario, como el verbo to be, hasta los especializados para distintas profesiones y labores. 

Cabe señalar que los verbos irregulares cumplen las mismas funciones que los verbos regulares en inglés, es decir, expresar estados o acciones, y se ubican dentro de la oración en la misma posición.